14/6/08

De vuelta desde el archipiélago

Tras varios meses de ausencia, y despues de que mí última entrada fuera más producto de la ebriedad que de cualquier otra cosa, me alegro de poder volver a estar con vosotros.

Ayer en un lapso durante la jornada laboral, me dio por pensar cuánto había cambiado mi vida en los últimos 18 meses. Separado del calor de aquellos que tanto me conocen, llevo un tipo de vida que siendo también gratificante y enriquecedora, es distinta en algunos aspectos. Añoro sin amargura, pero añoro.

Llevo en Fuerteventura desde el mes de Octubre. Es una tierra en medio del Atlántico, hermosa, pero vacia de libros y llena de gentes ensimismadas, en un aislamiento que quizas no es solo justificable a partir de la mera ubicación física.

A continuación, os voy a dejar unas lineas que escribí un día en el que pensaba en lo maravilloso que resulta que el nombre de uno surja con cariño de los labios de otro. Cuando llevas tiempo lejos de tu hogar, a veces asalta el miedo, mientras hablas con alguién de algún amigo lejano, de que tu nombre ya no aparezca en las conversaciones y entonces, casi te dan ganas de rezar...

La boca de otro

Es un momento, un chasquido de carne
Una cabriola tierna de saliva y lengua
El sonido de tu nombre llena mi mundo
En un juego del ausente y del presente

Es la boca mia que te trae hasta aquí
En este lugar tan lejano donde no estuviste
Te saco de mis labios para que mires esta esmeralda
Y seas feliz conmigo aunque ahora ya no demos paseos

Por caminos de nuestra pequeña ciudad de provincias
Asomada al cantábrico muy bravo y no siempre frio
No tan distinto de este lugar que es el mío ahora
Y donde por la magia de capricornio te invoco a mi vera

Y las vidas, pendientes, discurren lejanas, entre nuevos riscos
Pero la correosa memoria aun puede trasvasar los cauces
Elástica, todo lo fiel que la deja, el tiempo y la lejanía,
Sólida, todo lo fiel que la hizo, la confianza y risa.

Y deseo entonces la dicha de yo estar en la boca del otro.



1/6/08

Cosas de sábado

Definición de la RAE

sarcasmo.

(Del lat. sarcasmus, y este del gr. σαρκασμός).

1. m. Burla sangrienta, ironía mordaz y cruel con que se ofende o maltrata a alguien o algo.



En el post anterior se abordó con cierta ligereza dos de los aspectos más prominentes del pueblo suizo, que son el formalismo y la desconfianza. En esta ocasión, vamos a seguir analizando a esta curioso nación, a través de otras de sus peculiaridades más destacadas: su simpleza y su demarcada falta de criterio. La herramienta que se utilizará para ilustrar estas características de los suizos será el sarcasmo.

Hace más de una semana recibí una carta en el buzón, cuyo remitente era el ayuntamiento de Ginebra. Como es habitual, imaginé que el ayuntamiento pretendía sacarme más dinero por cualquier asunto que se le pudiera ocurrir, pero cuál fue mi sorpresa cuando abrí la carta, y me encontré un documento en el que se leía: "Normas de la Zona 30".

Efectivamente, el límite de velocidad de mi barrio iba a ser reducido de 50km/h a 30km/h, y como es natural, me enviaron las normas a casa. Pero no sólo había normas en el sobre, también encontré un documento azul que rápidamente atrajo mi atención: "INVITACIÓN a la fiesta de la zona 30, próximo sábado a las 10,30 de la mañana. Desfiles, discursos, etc".

Documentación recibida por correo ordinario

Sólo los suizos son capaces de hacer una fiesta para celebrar que el límite de velocidad de un barrio pasa de ser 50km/h a ser 30km/h.

En ese mismo momento adopté la sana decisión de vivir y preparar esa fiesta como lo haría un suizo auténtico. Mis neuronas se reconvirtieron para encontrar en esta suma gilipollez del cambio de velocidad, un acontecimiento especial y único. Y sin darme cuenta una increible sensación de ilusión comenzó a recorrer mi cuerpo.

La fiesta de la zona 30!!!!!

Dios mío, ¡No me lo puedo perder!


Ingredientes para hacerse pasar por un paleto suizo viviendo su fiesta de la zona 30:
  • Gorra con la bandera de Suiza
  • Camiseta: J'aime le zone 30
  • Copazo
  • Botellas de cerveza
  • Calcetines blancos J'Hayber doble tejido protección MAX
  • Chanclas
  • Colega para sacar las fotos, en este caso Luca

Los objetos coloreados en rojo no pudieron ser adquiridos a tiempo. En el caso del copazo, debido fundamentalmente a que ciertas personas me acabaron los suministros en la cena de la noche anterior.


Gorra homologada 100% swiss paleto. Calcetines J'hayber. Indestructibles


Luca se ofreció amablemente a venir
a inmortalizar el momento, a pesar de tratarse
de un sábado a las 10 de la mañana.
Foto de archivo.

Ejecución:

Un paleto autóctono siempre se caracteriza por su
semblante serio y expresión inteligente.
El efecto sólo se consigue dejando que el pelo
sobresalga entre 2 o 3 centímetros por los bordes de la gorra.

El día ameneció muy lluvioso y no fue posible el uso de pantalones cortos.

Algunas baldosas se rompieron tras el contacto directo
con unos auténticos calcetines J'Hayber

En el exterior, la fiesta había sido preparada prestando atención a todo tipo de pequeños detalles.

La decoración, especialmente diseñada para
la fiesta de la zona 30 hizo las delicias de pequeños y mayores.

La presencia de artistas callejeros se dejó ver durante todo el día, sacando las carcajadas de un público encantado.

Duendes y faunos hicieron enloquecer
a muchos de los asistentes más ilusionados.

Y en definitiva, bailes regionales, puestos de perritos calientes. Y sobre todo, mucha, mucha, ilusión.

¡Viva la zona 30 de mi barrio! ¡Aupa Suiza! ¡Chupi Guayyyyyy!